Los transtornos del sueño, ya sea la dificultad para conciliar el sueño o los despertares nocturnos, son habituales en los niños, algunos con más dificultades que otros para encontrar su ritmo. A menudo son problemas pasajeros, que frecuentemente están vinculados a un desajuste entre el ritmo de la vida moderna y las necesidades del niño. También pueden causar nerviosismo y agitación, que afecta a la relajación y la concentración. Los complementos alimenticios son una ayuda natural para reducir la agitación y facilitar el sueño, sin efectos secundarios y sin adicción: su uso no produce adicción o a somnolencia diurna.